viernes, 17 de junio de 2011

Etapa 1. Roncesvalles - Puente la Reina

Son las 6 de la mañana y como por arte de magia se encienden las luces. Por la ventana ya clarea el día y lo primero que hago es mirar al cielo para ver como se presenta el día. Solo se ven nubes dispersas, esto promete. Si hay algo que no me gusta nada en la bici, es la lluvia y el barro.

Toca asearse un poco y vestirse. Un par de barritas y un buen trago de agua como desayuno. A las 7 ya estoy dando pedales. La parte mala es que hace mucho fresquito.

Ayer me junté con un yugoslavo que dice ser británico de nombre inpronunciable y que además no recuerdo. Me comentó que él tiene idea de hacer como unos 50 km diarios. Mal empezamos, esa no es mi idea. Salimos juntos de Roncesvalles después de las fotos de rigor. Ya en las primeras cuestecitas el colega se me queda descolgado, yo no soy ningún máquina pero si he decidido hacerlo solo era para evitar esto. Me toca esperarle en las subidas y en las bajadas ya que está poco ducho y veo que le da un poco de miedo las bajadas y las piedras.

Bajando el alto de Erro, por si faltaba algo, él pincha. Que bien, clase práctica de cambio de cámara. Para que estamos los peregrinos, para ayudar cuando se necesita. Se me olvidaba decir que con el ritmo tan estupendo que llevamos los caminantes nos van alcanzando. Para rematar la faena, en medio del arreglo empieza a llover. Que alegría, estoy entusiasmado.

Una vez que hemos cambiado la cámara y montado las alforjas me toca ponerme el impermeable y meter todo en bolsas para que no se moje. Son las diez y media de la mañana y llevamos la friolera de 16 kilómetros.

Después de un par de subidas más y ante el amable ofrecimiento por su parte de que siguiera a mi ritmo, le tomo la palabra y nos despedimos, yo no puedo seguir a así porque me quemo el primer día.

Una vez soltado lastre toca la bajada del puerto de Erro, no la recordaba tan peligrosa y técnica. He tenido que poner pié a tierra varias veces. Por fín llego a Zubiri y me vienen los recuerdos de hace dos años cuando dormimos en este pueblo, pero tengo que continuar. Larrasoaña, Akerreta, Zuriain, van pasando los pueblos con subidas y bajadas que empiezan a dejar huella en mis piernas. Paso por Villaba y se ve que el amigo Indurain ha dejado una afición tremenda. No quiero exagerar pero un viernes por la mañana me he debido de cruzar con mas de 20 ciclistas y no haciendo el Camino precisamente.

Llego a Pamplona, atravieso el casco urbano, paso por la universidad y llego a Zizur menor. Como noto cierto vacío en el estómago me compro un par de plátanos y de paso descanso un ratito, lo necesito. Decido terminar la etapa en Puente la Reina. Me quedan unos 19 kilómetros y creo que seré capaz de hacerlos.

Sabía que por medio estaba el Alto del Perdón, pero no pensaba que lo iba a pasar tan mal, que duro ha sido. El sol se ha puesto a lucir justo en el peor momento. Está claro que nunca llueve a gusto de todos. Tras muchas paradas y sobre todo mucho empujing he llegado al Alto del Perdón un poco eslomado, la verdad.

Subidón de moral y energía, solo me quedan 11 km y todo es bajada. Menuda bajadita peligrosa, la de Erro no es nada comparada con esta. Me dolían los dedos de tanto apretar los frenos y las piernas se me estaban cargando con la tensión de ir de pié todo el rato. Naturalmente, también he tenido que poner pié a tierra varias veces.

Que duro y largo se me está haciendo el día. Uterga, Muruzábal, Obanos, pero ¿es que no llego nunca el final o que? Si, por fín veo las primeras casas de Puente la Reina y como recordaba, el albergue está en la entrada del pueblo.

Son las cuatro y media y estoy reventado. Me registro, sello la credencial y por fin la ducha reparadora mas merecida y deseada que nunca. Vuelvo a ser un poco persona. Han sido unos 72 km mu largos y duros ya pondré los datos del velocímetro que me lo he dejado en la taquilla.

Mañana mas y esperemos que mejor.

3 comentarios:

  1. BIENNNNNNNNNNNNNNNN. ufffff que emoción desde un sitio calentito y con un buen café te escribo para que notes el aliento de los que te echamos de menos. Imagino que los primeros días se harán duros pero recuerda que es solo hasta que se engrase la máquina ... Y QUE MÁQUINA jejejejejeje. En vez de yugoslavo busac una yugoslava y las clases de taller que vayan al Decathlon... bueno es que eres un buen BICIGRINO. Espero que la lluvia desaparezca pero las cuestas noooooooooo. Que sino termianrás sobrao. Ahhh por cierto, Mañana tu equipo de pico, pico te echará de menos... Pero míralo así "Una derrota que te ahorras" jejeje. Espero que TODOS te demos fuerzas desde cada uno de nuestros cómodos y confortables lugares.

    PD: Yugoslavo y tú hablando en Yugoslavipanish...habrá que verte. Las fotos más de cerca Guapetón... Un abrazo de parte de BEPA...

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  2. El yugoslavo hablaba muy decentemente el español, por tanto, no había problemas. Algún rato hemos practicado el inglés que lo tengo olvidadísimo.

    Gracias por los ánimos.

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  3. ÁNIMO!!!TE ADMIRO POR LA VOLUNTAD Y EL ESFUERZO QUE TIENES ... Y SOBRE TODO ... POR LA ALEGRÍA Y LA ILUSIÓN QUE PONES !!! SIEMPRE QUE PUEDA TE SEGUIRÉ ... ADEMÁS DE SER AMENO E INTERESANTE TU RELATO ...CON ESTA BREVE AUTOBIOGRAFÍA DE UN BICIGRINO, SE APRENDE CULTURA Y GEOGRAFÍA DE ESPAÑA. POR TÍ!!!! BESOS CONCHY

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